Finalmente confiamos que la actual administración pueda avanzar en su agenda al corto y mediano plazo, desarrollando los cambios necesarios en las herramientas normativas que nos regulan (DS 49) y la redistribución de las partidas presupuestarias para los siguientes años, poniendo el foco en una política pública habitacional que apunte a construir la dignidad que miles de familias merecemos.
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